¿Sabes cuánto y cómo tienes que reclamar para que te devuelvan lo que has pagado de más?
Muchas son las personas hipotecadas que aún no conocen si realmente su hipoteca tiene la famosa clausula suelo de la que todo el mundo habla. El primer indicio de que podemos tenerla es que estamos pagando la misma cuota en los últimos años, es decir que no ha variado ni un céntimo la letra que se paga cada mes. En este sentido, hay que tener en cuenta que dado que el euríbor desde hace uno años está bajando progresivamente, por lo que nuestro préstamo hipotecario debe haber descendido también.
Pero para asegurarse si de verdad tenemos suelo en nuestra hipoteca debemos mirar en la escritura de la hipoteca en el apartado llamado interés o tipos de interés. Se suele identificar con títulos como límites a la aplicación del interés variable, límite de variabilidad o tipo de interés variable.
No hay que confundirla con la escritura del préstamo hipotecario con la de la vivienda ya que en muchos casos no se dispone del primero. Para hacerse con él se tiene que solicitar a través de un notario.
También se puede saber analizando las cuotas de la hipoteca ya que si está suscrita a un interés variable o vinculado al Euribor, éstas pueden variar. Si se está pagando la misma cantidad durante años, probablemente tendrá cláusula suelo.
Ejemplo: Las cuotas de un préstamo de 100.000 euros a amortizar el 20 años y con un diferencial del 0,5% sobre el euríbor, que se revisa cada mes de diciembre, serían en 2016 de 434 euros mientras que cinco años atrás, en 2011, alcanzarían los 532.
Tras la aprobación del Real Decreto de reclamación judicial para las cláusulas suelo y con el fin de no colapsar los juzgados, es fundamental contar con la asistencia de un abogado que garantice una negociación con el banco acorde a los derecho del consumidor.
En este sentido, debes saber que para poder realizar los trámites necesitamos tener una serie de documentación para estudiar el caso:
- Copia de la escritura de hipoteca.
- Cuadro de amortización del préstamo de las cuotas pagadas desde el inicio del préstamo hasta la fecha actual.
- Copia de los documentos firmados con el banco, por la cláusula suelo, como pueden ser escrituras de novación, compromiso de supresión de la cláusula suelo, etc.
¿Cómo procedemos a reclamar en el juzgado?
El afectado puede acudir a los tribunales con todas las probabilidades de éxito. El afectado se ha sentido engañado por la sucursal bancaria, ya que en el momento de la firma de la hipoteca, éste no fue informado de la aplicación de esta cláusula y dicho banco comenzó a cobrar el sobreprecio sobre el tipo de interés más el diferencial pactado. Por ello es el momento de anular la cláusula suelo y de reclamar la devolución de las cantidades cobradas de más por la aplicación de dicha cláusula.